Ganar a la Ruleta: ¿Sirven los sistemas?
Tal como suele decirse: "La ruleta está blindada matemáticamente".
Es decir, en el largo plazo reina el equilibrio. Por ejemplo, si tomamos una chance simple como color, veremos que cuanto más larga sea la permanencia que tomemos (100.000 bolas o más) más nos acercaremos al equilibrio matemático de 50% para cada color.
En el corto plazo, por el contrario reina el desequilibrio. Esto es que si tomamos diez bolas, pueden darse 8 rojos y 2 negros, o sea el 80% y el 20% respectivamente, muy lejos del hipotético 50% de la probabilidad matemática.
Los sistemas funcionan bien cuando la ruleta se mantiene cerca del equilibrio o cuando el desequilibrio (dispersión) juega a favor.
Por ejemplo, si estoy usando un sistema a rojo que resiste cinco jugadas cuando sale el contrario (la típica martingala....), las cosas me van a funcionar cuando el juego se mantenga cerca del equilibrio o cuando salgan más rojos que negros. En el momento que la ruleta busque su equilibrio tirando más negros que rojos, y estas series de negro superen las cinco bolas el sistema caerá y el casino se llevará la caja.
O sea, si uso ese sistema y me está yendo bien, lo lógico es que a medida que lo sigo jugando en algún punto la dispersión me va a jugar en contra y todo se equilibrará. Cuanto más tiempo lo juego, más me acerco al abismo.
Todo sistema funciona dentro de ciertos parámetros, cuando la dispersión juega en contra el sistema caerá. Y en este sentido, no existen sistemas infalibles.
Sintetizando, en el largo plazo todos los sistemas son perdedores.
Pero, en el corto plazo todos los sistemas son ganadores.
Entonces, es suicida jugar mecánicamente a un sólo sistema, porque sabemos que aunque nos esté yendo bien ahora, más adelante la ola vendrá en contra.
La mejor estrategia es usar un sistema, ganar una o dos veces y rotar de sistema y de ser posible de mesa. Cuanto más rápido obtengamos nuestro objetivo de ganancia, menos peligro de que la ruleta nos juegue en contra. El tiempo es un aliado del Casino, cuanto más tiempo de juego, más cerca del desequilibrio negativo estaremos.
Si juntamos varios pequeños ciclos positivos (microjuegos) tendremos un gran ciclo positivo.
En este sentido, es más que conveniente apuntar a un objetivo pequeño en fichas, digamos de 5 a 20 fichas y en la medida que lo vayamos dominando, en lugar de aumentar la cantidad de fichas a ganar, lo que haremos es aumentar el valor de las fichas en juego. Es decir, puedo empezar con fichas de un valor 1 y después pasar a 2, 5, 10, etc. con el tiempo y el capital que dispongamos.
El tiempo para ganar pocas fichas es sensiblemente menor que para ganar muchas, y tal como dijimos los minutos nos juegan en contra en la ruleta.