Es una extensión del modelo visto en la entrada anterior.
En este caso cuando llegamos a tener las cinco apuestas desplegadas y anidadas (Seiscena-Cuadro-Calle-Semipleno-Pleno) y un acierto no nos deja en positivo, entonces empezamos a concentrar las apuestas en dirección al pleno. Es decir, me llevo la ficha de la seiscena sobre la del cuadro que me queda con dos fichas mientras el resto de las apuestas permanece igual, seguimos apostando sólo cinco fichas por bola.
En caso de acierto sin positivo, llevamos las dos fichas de cuadro sobre la de calle que nos quedará con tres y el resto permanece con una (Semipleno y pleno). En caso de acierto sin positivo llevamos las tres fichas de calle sobre el semipleno que nos queda con cuatro. En caso de acierto sin positivo llevamos las cuatro fichas de semipleno sobre el pleno que nos quedará sobre el pleno. En este caso con el acierto volvemos a recomenzar ya sea que hayamos logrado el positivo o no.
En muy raras ocasiones suele caerse la caja de 400 fichas, si es así veremos que en los promedios los saldos son positivos ya que no se tarda demasiado en recuperar la caja perdida en este modelo. En este caso podemos aplicar el manejo de caja 50/50 o similares (ver entradas anteriores) o modelos de fraccionamiento. También se adapta muy bien a la matriz común o mejor aún a la matriz LW.
Caja de 400 para objetivo de 20 a 40 fichas.
Si te interesa que este blog se siga publicando ayudanos con un un click en un aviso, gracias.
